Los Estatutos van precedidos de una serie de escritos, incluidos en el mismo documento, donde se pueden apreciar los distintos pormenores que antecedieron a la erección canónica de la Hermandad.
Así, comienza con un escrito firmado por Francisco Valenzuela y José García, dirigido al Ilustre Gobernador Eclesiástico de esta Diócesis Vacante, el 23 de abril de 1874, finalizando después de unas modificaciones, en las que se le da autoridad al cura párroco de Santa Marina de Aguas Santas, bajo cuya jurisdicción pertenece la ubicación de la Sagrada Imagen de Jesús Caído; al mismo tiempo que corrigen los costes de los actos funerarios de los hermanos que fallezcan, al limitar el número de misas rezadas a seis, siendo los costes que superen a un “funeral llano”, por cuenta de quien lo encargue.
En los Estatutos se recogen entre otros. La forma de elección a Hermano Mayor y su tiempo de mandato; la obligación de los hermanos a asistir y acompañar a la divina Imagen de Nuestro Padre Jesús Caído siempre que salga en procesión; la obligación de los hermanos a asistir a una Fiesta solemne con sermón el domingo de Pasión, etc.
Publicamos algunas páginas, de este documento. El documento completo está a disposición de los hermanos que deseen verlo.
Este documento, que como dice en la portada, es copia fe los Estatutos de la Hermandad de Jesús Caído y Ntra. Sra. Del Mayor Dolor de 1874, está firmada por el marqués de Villaseca, que se los regaló al entonces Superior de los Carmelitas Descalzos de Córdoba, Reverendo Padre Fray Rafael de Santa Teresa de Jesús, el veinticuatro de febrero de mil novecientos veinticinco.
Se trata de una copia literal, manuscrita en papel rayado, donde además señala qué tipo y donde van los sellos que autentifican el original (también disponible en nuestra web). Las 12 páginas van guardadas en dos tapas blandas, también de papel, y todo ello cosido con hilo.
Presentamos las primera, segunda y última pagina.
El acta de la Junta General de la Hermandad de Ntro. Padre Jesús Caído y Nuestra Señora de la Soledad, está fechada el 15 de febrero de 1880.
Bajo la presidencia del señor cura párroco de Santa Marina de Aguas Santas, don Francisco Carrascosa, se reunieron los 15 señores reseñados en el margen del documento, asistiendo así a la apertura de la sesión que tenía como objeto el nombramiento de Hermano Mayor, tras el fallecimiento de don Manuel Taguas, que ocupaba el cargo hasta entonces “con gran fervor y virtud”, en palabras del cura párroco, tras lo cual, el conjunto de los allí reunidos procedieron a orar por el descanso del alma del señor Taguas.
Acto seguido, uno de los hermanos allí presentes pidió la palabra para proponer a don Rafael Molina como Hermano Mayor, aduciendo a su gran religiosidad y a su participación en distintos proyectos de recuperación del patrimonio eclesiástico, como la reposición de la torre de la Iglesia de San Cayetano, así como en la realización de grandes funciones religiosas que este hermano costeaba a sus expensas. La propuesta fue aceptada y a continuación se procedió al nombramiento del Vice-Hermano Mayor y del Tesorero, además del resto de la Junta como marcaban los estatutos.